Personas con dificultad para digerir el gluten, la lactosa o fructosa, así como otros nutrientes promotores de intolerancias o sensibilidades recurrentes en la terapia digestiva y su sintomatología asociada: indigestión dolor abdominal, gases, náuseas, vómitos y alteración de las deposiciones.
En casos de desnutrición por baja absorción de los alimentos o mejora general de los procesos digestivos.